Las abejas son los seres vivos más importantes del planeta y el 20 de mayo es su día mundial.
En diciembre de 2017, la Asamblea General de Las Naciones Unidas declaró oficialmente el 20 de mayo como el día mundial de las abejas y su objetivo es concienciarnos así sobre el déficit de polinización, la importancia de proteger a las abejas, frenar el declive mundial de sus poblaciones y detener la pérdida de biodiversidad. A/RES/72/211 Día Mundial de las Abejas 17-23278 2/3.
Este año 2024 es un año decisivo para la apicultura y hay muy buenas noticias en el proceso para que la UNESCO declare la apicultura patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad. Están en marcha los trámites finales para la declaración oficial a nivel nacional y la fase de incoación de esta primavera culminará, a final del verano, con la declaración oficial por parte del Ministerio de Cultura con la anotación definitiva en el Inventario General y su publicación en el BOE.
Además, estamos preparando con la Facultad de Ciencias Sociales y Antropología Social de la Universidad de Valencia, los trabajos de investigación etnográfica que incluyan el inventario y activación por parte de los actores relacionados con la actividad apícola.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoce la urgente necesidad de proteger a las abejas y otros polinizadores de manera sostenible. El problema de la disminución de la diversidad de polinizadores en el mundo y los riesgos que ello implica para la sostenibilidad de la agricultura, los medios de vida del ser humano y el suministro de alimentos. Además, la ONU reconoce la contribución y el papel fundamental que desempeñan las abejas y otros polinizadores en la producción sostenible de alimentos y la nutrición, promoviendo así la seguridad alimentaria para la población mundial en crecimiento y contribuyendo al alivio de la pobreza, la erradicación del hambre y la salud humana. Resulta vital, la contribución que los servicios ecosistémicos proporcionados por las abejas y otros polinizadores aportan a la salud del ecosistema, al preservar el estado de la diversidad biológica, genética y de las especies. Existe una gran preocupación porque las abejas y otros polinizadores están en peligro a causa de una serie de factores, en particular relacionados con los efectos de actividades humanas como los cambios en el uso de la tierra, las prácticas de agricultura intensiva y el uso de plaguicidas, así como la contaminación, las plagas, las enfermedades y el cambio climático, que amenazan su hábitat, su salud y su desarrollo,
Por todo ello, la Organización de las Naciones Unidas reconoce la urgente necesidad de sensibilizar a todos los niveles y de promover y favorecer acciones para proteger a las abejas y otros polinizadores, a fin de contribuir a su salud y su desarrollo, teniendo en cuenta que es importante mejorar los servicios de los polinizadores para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Desde APIADS, llevamos cerca de 15 años trabajando en la iniciativa para que se declare la apicultura patrimonio cultural inmaterial y este año 2024 estamos un poco más cerca de conseguirlo.
En la campaña de Change.org/Apicultura Change.org/Sosabejas ya hemos recopilado más de 116000 firmas y tenemos el apoyo de COAG que agrupa 15.000 apicultores con cerca de 1 millón de colmenas en toda España y se han entregado informes de apoyo en las Consejerias de Cultura de 14 Comunidades Autónomas.
El pasado año 2023 se pusieron en marcha los trámites necesarios para la declaración de la Apicultura como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, y a finales de verano de 2024 está prevista la declaración oficial por parte del Ministerio de Cultura con la anotación definitiva en el Inventario General y su publicación en el BOE.
En estos momentos, la apicultura se encuentra al borde del abismo y es urgente la puesta en marcha de un plan de viabilidad. La apicultura es cada vez menos rentable a causa de los bajos precios, pero también porque las colmenas son más difíciles de mantener en condiciones óptimas a causa de las múltiples patologías, efectos nocivos de plaguicidas, problemas ambientales y climáticos.
En la Comunidad Valenciana, donde está el Santuario Mundial de la apicultura, queremos celebrar esta fecha señalada recordando la importancia de su labor polinizadora en ecosistemas naturales y agrarios. La abeja y la apicultura son pilares de la biodiversidad y bioindicadores de la salud de nuestro planeta.
Apoya esta iniciativa en Change.org/ApiculturaChange.org/Sosabejas para que la apicultura sea declarada por la UNESCO patrimonio inmaterial de la Humanidad.
¡FELIZ DÍA MUNDIAL DE LAS ABEJAS 2024!